Como elegir un termo eléctrico
Si has llegado hasta aquí es porque posiblemente no estés seguro de como elegir un termo eléctrico. Un termo eléctrico es un deposito de agua que mediante unas resistencias eléctricas permiten generar un aporte de agua caliente sanitaria consumiendo energía eléctrica.
Es la forma más económica y tecnicamente más fácil de disponer de agua caliente en casa, ya que requiere de menos elementos para funcionar, y se pueden ubicar en cualquier lugar Tan solo debemos de tener en cuenta unas pequeñas pautas antes para tener claro como elegir un termo eléctrico.
PUNTOS CLAVE COMO ELEGIR UN TERMO ELÉCTRICO
VOLUMEN DE ACUMULACIÓN DEL TERMO ELÉCTRICO
El volumen de acumulación de un termo es la cantidad de agua que el deposito es capaz de acumular, es un factor muy importante a la hora de comprar un sistema de este tipo. El consumo de un termo varía mucho en función de la capacidad del sistema, así como el tiempo que tarda en calentar el agua.
Por ello, conocer las necesidades de nuestro hogar puede ayudar a decantarnos por una capacidad u otra. Si vivimos solos, o somos dos personas que no se duchan de forma consecutiva, optaremos por termos de bajas capacidades. Si al contrario somos una familia con miembros que se van a duchar de forma sucesiva, lo mejor es optar por una mayor capacidad.
Podemos encontrar termos eléctricos desde 15 hasta 200 litros. Por encima de este volumen, ya estaríamos hablando de un acumulador de ACS de suelo, ya que no hay pared que resista el peso de un termo de 300kg con 300l de agua dentro.
Como norma general se suele hacer un uso de entre 35/45 litros de agua caliente por persona y día
EFICIENCIA ENERGÉTICA DE UN TERMO ELÉCTRICO
El Etiquetado Energético es un sistema aplicable en los países europeos, en el que podemos observar el consumo de la energía anual, del producto que se ha etiquetado. Cuando escuchamos el término «Termo eléctrico clase A», este hace referencia a la parte de la etiqueta en la que se representa la eficiencia energética del termo, que va hoy en día desde la G hasta la A, en función de la eficiencia energética que estos sistemas tengan.
Aunque sí que hay termos eléctricos clase A llamados aerotermos o bombas de calor para ACS y de los que ya hemos hablado aquí, debemos saber que no existen termos eléctricos que cuenten con clase A salvo alguna excepción con volúmenes de acumulación menores de 30 litros. La mejor clase energética posible en un termo eléctrico es la clase B.
CARACTERÍSTICAS INTERNAS DE UN TERMO ELÉCTRICO
Hay ciertos elementos internos del termo eléctrico que condicionan ciertos aspectos de su funcionamiento, y que influyen también en la mayoría de las veces en su durabilidad:
- Tipo de resistencias de un termo eléctrico
La resistencia de un termo eléctrico pude ser blindada de cobre, envainada o cerámica envainada. Las primeras van sumergidas dentro del termo, en contacto más directo con el agua, por lo que calientan antes. En cuanto a las cerámicas envainadas, tienen una protección con respecto al agua, pero la transferencia de calor se realiza más lentamente.
También existen resistencias con recubrimiento de níquel en los termos de acero inoxidable.
Es importante que el termo eléctrico cuente con resistencias anticalcáreas principalmente si vivimos en una zona de aguas duras.
Por lo tanto, la decisión depende del tipo de agua de nuestra zona. Si vivimos en una zona donde el agua es blanda, acumularemos poca cal, y podremos optar por las resistencias blindadas sumergidas. Si, en cambio, vivimos en una zona con un agua dura, deberemos proteger nuestra resistencia optando por una cerámica envainada.
- El ánodo
Incorporado en todos los termos, la misión de este ánodo es evitar la corrosión que los componentes metálicos del termo sufrirían debido a su contacto directo y permanente con el agua. Su composición de magnesio provoca que la corrosión lo ataque a él preferentemente, manteniendo por más tiempo inalterables el resto de materiales. Debido a su importancia y al desgaste que sufre, es esencial que este ánodo sea revisado y sustituido periódicamente para garantizar la protección del termo
Por lo tanto, la decisión depende del tipo de agua de nuestra zona. Si vivimos en una zona donde el agua es blanda, acumularemos poca cal, y podremos optar por las resistencias blindadas sumergidas. Si, en cambio, vivimos en una zona con un agua dura, deberemos proteger nuestra resistencia optando por una cerámica envainada.
Hoy en día muchos de los termos más modernos vienen con un tipo de ánodo llamado ánodo electrónico, cuyo funcionamiento consiste en hacer circular una corriente continua, mediante un ánodo especial de titanio activado situado en el interior del acumulador evitando la corrosión y sin necesidad de mantenimiento.
- El material, el aislamiento y recubrimiento
En el mercado podemos elegir entre varios materiales a la hora de elegir nuestro termo eléctrico; acero vitrificado, acero inox o acero duplex son los más frecuentes. La gran mayoría están construidos en acero vitrificado, ya que es el material más económico.
El aislamiento del termo es uno de los factores más importantes que afectan al consumo. Un buen aislamiento permite que, tras calentar el agua, el sistema pierda menos calor que uno mal aislado. De esta forma se mantiene la temperatura deseada durante más tiempo, evitando que el sistema tenga que volver a calentar el agua.
Por otro lado, el recubrimiento es la capa interna que protege el termo de las propiedades y los efectos del agua. Un buen recubrimiento nos ayudará a proteger el equipo de la corrosión y de la acumulación de cal. Invertir en un buen material de este tipo, sin duda alargará la vida útil de nuestro equipo.
Un ejemplo de un buen recubrimiento lo encontramos en el conocido como capa “azul” o recubrimiento vitrificado que llevan la gran mayoría de termos eléctricos.
Debemos tener en cuenta que para aumentar la durabilidad de un termo y evitar estres al material, en Calderas de Gas y Calefacción Coruña y Calderas Ferrol, siempre recomendamos la instalación de un vaso de expansión para proteger al termo de agua caliente del exceso de presión y volumen que se produce en la cuba.
MEDIDAS Y UBICACIÓN DE UN TERMO ELÉCTRICO
Hoy en día existen termos horizontales, termos verticales, e incluso algunos modelos que pueden colocarse en ambas posiciones. En función del espacio que tengamos disponible, elegiremos unos u otros. Pero debemos tener en cuenta que, si lo colocamos en pared, esta deberá poder soportar los pesos que indica la normativa de colocación, y que también deberemos dejar espacio para acceder a los componentes eléctricos.
Debemos recordar también que es importante que el termo esté lo más cerca posible del lugar de uso, es decir, el baño, ya que esto evitará las pérdidas de calor que se podrían sufrir en tuberías excesivamente largas. Después, en el lugar de su posicionamiento necesitaremos también una toma de agua caliente, una de agua fría y una toma de corriente.
Además de la capacidad en litros, necesitamos que el termo eléctrico se adapte a las características de nuestra vivienda o a la estancia en la que vaya a ser instalado. Con esa finalidad, encontramos en mercado termos de instalación vertical; horizontal; reversibles; Slim, específicos para espacios estrechos; y compactos, ideales para espacios especialmente reducidos.
Termos eléctricos de doble tanque y diseño planto (rectangular). Son cada vez más demandados y ofrecen tiempos de calentamiento más reducidos, así como un diseño más estético y cuidado
Debemos de tener en cuenta que si nos tenemos que decantar por un termo horizontal, su eficiencia será menor que un termo vertical.
En Instalaccións RODD trabajamos con las mejores marcas de termos del mercado y te ayudamos a saber como elegir un termo eléctrico que se adapte mejor a sus necesidades.